23 de mayo de 2015 – Córdoba – Hoy por la mañana tomamos el tren en Santa Justa, Sevilla, y en apenas cuarenta y cinco minutos nos bajamos en Córdoba. El primer bus que llegó a la parada de la estación de trenes nos dejó a trescientos metros de la Plaza de las Tiendecillas. Y de nuestro hotel Boston. Como llegamos temprano, y había que esperar por la habitación, dejamos los bultos en consigna, y nos largamos a caminar. Pronto llegamos a la Mezquita- catedral, todo el camino en bajada, y allí nos metimos. En este templo, al menos por ahora, va ganando el dios de los cristianos dos a uno. Porque primero hubo una iglesia, luego una bella y enorme mezquita, y ahora es una catedral de dudosos estilos entreverados. La entrada a € 8.00 cada uno, sin descuento para nadie. Vale lo que cuesta, y mucho más. Regresamos al hotel, descansamos un buen rato y luego de un copioso almuerzo, recorrimos la judería, incluyendo la pequeña sinagoga, previo paso por la estatua de Maimónides. En el vagabundeo llegamos a las caballerizas reales, nada interesantes. Como la caminata fue larga, agregamos además el cruce del puente romano, sobre el Guadalquivir. Rodeamos la Torre de Calahorra y seguimos caminando hasta la Feria de Mayo, que no sabíamos que existía. Pero habíamos visto pasar tantas mujeres con sus vestidos de volados y lunares, que decidimos seguirlas. La feria consiste en carpas con comida, y bebidas abundantes, y música a todo volumen, sea flamenca o más o menos. Ni comimos ni bebimos. Entre el gentío circulan todo tipo de coches de caballos, con los cocheros y sus pasajeros bien ataviados al uso tradicional. Al regresar, lo de siempre, ahora sí, comida y bebida, frente  a la Plaza de las Tiendecillas, agradable plaza vecina al hotel.
 24 de mayo de 2015- Córdoba – Alcázar de los reyes católicos, pequeño, no muy interesante. Bonitos jardines, con grupo escultórico donde Colón les muestra su minifalda a los reyes, que no parecen muy excitados por las piernas del Gran Capitán. Hay una sala con varios mosaicos romanos, procedentes de excavaciones en la ciudad, muy completos. Todo lo dicho, a € 4,50 por persona. Vuelta al hotel, gran descanso y compra de tickets en internet para el bus Sevilla-Tavira. Más elección y reserva del hotel en Tavira, que como seguramente sabéis, es una playa del Algarve, en Portugal.